Texto de información rescatada.

Zombies en la escuela por Julian Garbulsky.

          La escuela secundaria como un centro de formación integral dentro de la educación básica busca que los alumnos obtengan ciertos conocimientos para su preparación y poder dar el seguimiento a estudios posteriores. Lo que se enseña en las escuelas no precisa ciertamente el interés de los alumnos, volviéndose para muchos un ambiente monótono y mecanizado sobre cómo es que tienen que aprender.

          Las técnicas utilizadas buscan mejorar la manera en que los alumnos puedan llegar a un aprendizaje significativo, pero en sí no existe un proceso para indicar las habilidades de cada alumno y poder explotarlas más adelante dentro de un sistema educativo público. 

         Los jóvenes presentan varias reacciones a lo que se les enseña y se muestran un tanto inquietos al cuestionarse sobre lo que están aprendiendo, cómo es que lo llevarán a la práctica y para que les servirá en la vida. Si existiera en cada escuela un departamento que pudiera observar las habilidades de cada alumno y encaminara su estudio a lo que en verdad presentan interés y talento, no habría tantos estudiantes frustrados ante la situación de que estudiar y a lo que se dedicarán por el resto de la vida.

           La monotonía y las formas ambiguas hacen que los estudiantes no puedan desarrollarse en la búsqueda de sus propias formas de estudio, si no se les explica o se les da una orden, les resulta casi imposible formular las tareas o actividades dentro de las aulas.

         El psicólogo John B. Watson en su interés de convertir el campo de estudio en algo que se puede observar, centró la mayor parte de su trabajo en describir leyes generales en donde se rige una conducta voluntaria “la conducta voluntaria de los organismos; esa conducta que ocurre en un momento determinado, pero que podría no haber ocurrido al no estar encadenada a algún estímulo elicitante” (Watson.1913). donde el conocimiento debe darse directamente de individuo a individuo por medio de un estímulo en conjunto con el lenguaje.

         La elección sobre lo que se refiere al gusto e interés de los alumnos se manifiesta en los buenos resultados de aprovechamiento y en la creación de habilidades sobresalientes, donde demuestren las actitudes positivas de los estudiantes en cuanto a su estudio, sin desaprovechar el tiempo y espacio para la formación de los mismos. Los estudiantes no tienen la posibilidad de elegir lo que quieren aprender “El educador es quien escogen los contenidos programáticos; los educandos son los que se acomodan a él y jamás se escuchan”. (Santos Gómez, M. (2008). Ideas filosóficas que fundamentan la pedagogía de Paulo Freire. Revista Iberoamericana.

Palabras clave.
Escuela.	La escuela es reconocida como un centro formativo tanto de conocimiento como de valores; en donde debería de enseñarse lo que realmente le sirva al alumno para su preparación ante el mundo actual. La escuela para la educación básica promueve que se enseñe apegado a un plan y programas que conlleve a una preparación inicial.
Maestro.	El maestro cumple el papel de facilitador, guía, apoyo y proveedor del conocimiento impartido. Promueve y modifica los cambios necesarios para que cada uno de sus alumnos logre el aprendizaje.
Alumno.	Los alumnos se encuentran en un conflicto constante entre lo que quieren aprender y lo que en verdad necesitan aprender, se cuestionan en repetidas ocasiones “para qué necesito aprender esto”. No logran establecer objetivos de estudio con facilidad y de acuerdo a su edad.
Actividades de enseñanza.	Es necesario la modificación de las actividades en relación a las presentadas por los alumnos y los requerimientos de la sociedad. Se definirán al cabo del reconocimiento de los grupos y los tipos de alumno.
Sentimientos generados.	Las emociones presentadas dentro de un salón de clases y de la institución educativa varia en cuanto a los diferentes contextos y la forma en que se dé la relación maestro alumno. La preparación y el estudio puede generar cierta angustia y sentimiento de estrés en los estudiantes, al no lograr comprender y el no aprobar con promedios “buenos”, la angustia llega hasta el docente por la preocupación que el total de sus alumnos comprendan y obtengan un conocimiento permanente.
Nuevas propuestas.	Las propuestas educativas deben sostenerse en el ámbito de lo que en verdad se necesita y de los requerimientos de cada alumno. Potenciar las habilidades crea individuos competentes listos para participar en sociedad. Proponer en base al cambio crea un objetivo de mejoramiento escolar y de estudios.

 

Referencias.

Pellón, R. (2013). Watson, Skinner y Algunas Disputas dentro del Conductismo. Revista colombiana de psicología, 22(2), 389-399.

Sotomayor Garcia, G. (2011). De la educación bancaria en el Aula, a la educación problematizadora en la Red. Didáctica, innovación y multimedia, (20), 0001-7.